Capítulo tres. Magnus Carlsen vs Fabiano Caruana.
Ya se han jugado las partidas 3 y 4, con sendas tablas y el marcador que continúa igualado. A pesar que desde algunos sectores comienzan a criticar el excesivo conservadurismo de los finalistas, no parece que este match tenga nada de especial hasta el momento ni que diste mucho de otros eventos de esta índole. Si miramos la historia, podemos observar comportamientos similares en Karpov vs Korchnoi (Baguio, 1978), Karpov vs Kasparov (prácticamente todos los matches que han jugado han contabilizado muchas tablas, desde Moscú 1984), Kasparov vs Anand (Nueva York, 1995) o, más recientemente, Carlsen frente a Anand (Chennai, 2013 y Khanty-Masisk, 2014) o Karjakin (Nueva York, 2016). Es lógico y se argumenta de muchas maneras, aunque remarco dos:
- La fuerza de ambos rivales suele ser muy pareja;
- los errores se pagan muy caro y uno solo puede costar el título, así que se suele tomar mayor precaución. En el resto de deportes no me parece que las finales sean muy distintas, al menos, en un primer momento.
Aunque si observamos estas primeras cuatro partidas, quizá la cuarta sea la que técnicamente tenga menos interés. Las tres primeras, no obstante, resultaron emocionantes y con una gran lucha durante muchas horas.
Un factor que puede resultar decisivo es el reciente descuido del equipo de Fabiano Caruana. Al parecer, en un vídeo publicado se ven unos pequeños apuntes sobre sus archivos de análisis. Apenas se ven unos nombres y jugadas de unas variantes. Esto, que para otros mortales apenas sería reseñable, en estos jugadores podría incluso resultar decisivo pues ofrece mucha información que el equipo de Carlsen puede esquivar.
En la sala de prensa tras la cuarta partida se les preguntó a ambos jugadores sobre la aparición de este vídeo (que fue eliminado a las pocas horas de la red). Fabiano no quiso realizar ninguna valoración. Magnus, en un tono quizá sarcástico, comentó que sabía de su existencia pero que aún no lo había visto.
Este hecho puede cambiar las estrategias de ambos jugadores desde aquí. Se habla también de que pueda ser una noticia falsa, algo que el equipo de Caruana haya decidido filtrar a consciencia para hacer dudar al equipo de Magnus. Todo puede ser.
Esta situación, desde luego, puede crear cierta tensión en el equipo de Magnus ya que no se sabe que puede ser lo adecuado: si aceptar que la información es real o no.
Se presenta interesante el match a partir de aquí por esta razón: ¿seguirá el equipo de Magnus la estrategia perfilada para el match o variará en algún punto? Y Caruana, ¿qué hará?
Creo que nunca podremos saber qué sucedió realmente con esta filtración pues es posible que tanto si fue real como si no, el equipo de Caruana es probable que admita después del match que fue un error. Pero quizá, no lo fue tanto…